Associació pel desenvolupament de les habilitats i capacitats cognitives, motrius i emocionals.
Atención individualizada y en pequeños grupos, para niños, adolescentes y adultos
La idea
de enseñar a meditar a los niños es bastante nueva en el mundo occidental,
aunque en Oriente hace muchísimo tiempo que la meditación constituye una parte
esencial de los primeros niveles de la educación escolar, cuando inculcan a los
niños una serie de técnicas que les serán beneficiosas a lo largo de toda la
vida.
La meditación es una forma
de conocerse a uno mismo, una herramienta más de
educación, ya que no hay conocimiento más útil que saber quien es uno mismo.
Con la meditación, niños y adultos pueden aprender a ver el mundo desde lo más profundo
de sí mismos.
Para ello, si vuestro hijo no
tiene la oportunidad de meditar en clase, existe la posibilidad de meditar por su propia cuenta.
Por ello, ahí van algunos consejos de iniciación:
La ambientación es fundamental.
Elegid un lugar limpio, cálido y lo más sencilloposible para
que los distintos estímulos no distraigan al niño. Si tenéis jardín o
terraza servirá en verano o primavera, lo mismo que en una playa solitaria
o en el campo, pero, en cualquier caso, un rincón de la casa también
debería bastar.
Enciende una o varias velas, coloca cojines para
acomodar el trasero y adorna la sala o el sitio con alguna imagen que
evoque la trascendencia, como una cruz si eres creyente o cualquier otro
símbolo. También es aconsejable encender incienso o preparar vapores de hierbas
para estimular el olfato con olores agradables.
La postura debe ser especialmente cómoda
y nada forzada. Existen pequeños bancos para facilitar las posturas de
meditación. Piensa que los niños suelen ser inquietos y se moverán si no
encuentran la postura cómoda. es importantísimo que el niño pueda
encontrar sin mucho esfuerzo un
silencio interior que le ayude a serenarse.
Finalmente, el mudra es el gesto que cada cual debe encontrar
para “activar” la meditación. El típico movimiento de los dedos de los
budistas e hinguistas con los dedos pulgar e índice o corazón es el más
conocido.
Podemos empezar. Deberás guiarle, primero, con la respiración,
facilitándole la consciencia de la propia postura y del recorrido del aire
que inhala. Dentro de un ambiente de silencio, repasa cada parte del
cuerpo, proyecta imágenes mentales que le ayuden a evadirse y a mirar
dentro de sí y ayúdale a sentir el propio bienestar.
Una vez adquirido ese punto, deja pasar el
tiempo y permite que libere sus pensamientos compartiendo el silencio. Tal
vez en fases más avanzadas podrás ayudarle a guiar sus pensamientos hacia el
autoconocimiento, hacia lo que siente, o tal vez él mismo sea capaz de llegar a
la introspección por sí solo.
La meditación puede durar minutos u horas, depende de cada
persona y del momento por el que atraviesa. Respeta lo que la mente del
pequeño o el adolescente mande, y no lo fuerces porque tal vez no es su
momento. La meditación tiene efectos si quien la hace cree en sus
beneficios, así que es primordial no luchar contra las sensaciones.
La depresión es un trastorno afectivo que varía desde las
bajadas transitorias del estado de ánimo que son
características de la vida misma, hasta el síndrome clínico, de
gravedad y duración importante con signos y síntomas asociados,
marcadamente distintos a la normalidad.
En el área psíquica estar deprimido produce tristeza, demoralización y
pérdida de autoestima. En la
orgánica da cansancio, abatimiento, hipoactividad, pérdida de apetito,
pérdida
de peso, alteraciones del sueño y disminución de la libido.
El taller és pràctic amb
activitats i meditacions per rebre la força i l'amor dels nostres pares
i avantpassats. Aprendrem els ordres de l'amor de Bert Hellinger i la
seva aplicació a l'àmbit educatiu, base de la pedagogia sistèmica.
Al
llarg del dia farem un treball de constel·lacions per a les persones
que ho necessitin i a on tots els participants podem descobrir aspectes
en relació a la nostra situació personal i aprendre de quina manera els
ordres de l'amor intervenen en la nostra felicitat i benestar.
“Nunca es demasiado tarde para ser la persona que podrías haber sido”- George Eliot
“Un tulipán no trata de impresionar a nadie. No se esfuerza
en ser diferente de una rosa. No tiene que hacerlo. Es diferente. Y hay
sitio en el jardín para cada una de las flores” - Marianne Williamson
“Cuando una puerta de felicidad se cierra, otra se abre.
Pero con frecuencia miramos tanto a la puerta cerrada que no somos
capaces de ver la puerta que se ha abierto frente a nosotros” - Hellen Keller
“El mayor error que una persona puede cometer es tener miedo de cometer un error.” - Elbert Hubbard
“La gente a la que le va bien la vida es la gente que va en busca de las circunstancias que quiere y, si no, las encuentra” – George Bernad Shaw
“Empieza haciendo lo necesario, después lo posible, y de repente te encontrarás haciendo lo imposible.” - San Francisco de Asís
“El éxito parece ser en buena parte cuestión de perseverar después de que otros hayan abandonado.” - William Feather
“Nadie nunca logró nada espléndido fuera de quienes se
atrevieron a creer que algo dentro de ellos era superior a las
circunstancias.” - Bruce Barton
“Cuando la vida te ofrezca un limón, exprímelo y haz limonada.” - W. Clement Stone
“Ponte de frente al sol y las sombras quedarán detrás de ti” – Proverbio mahorí
"La motivación es, en síntesis, lo que
hace que un individuo actúe y se comporte de una
determinada manera. Es una combinación de procesosintelectuales, fisiológicos y psicológicos que
decide, en una situación dada, con qué vigor se
actúa y en qué dirección se encauza la energía."
"Los factores que ocasionan, canalizan y sustentan la
conducta humana
en un sentido particular y comprometido."
"La motivación es un termino genérico que
se aplica a un amplia serie de impulsos, deseos, necesidades,
anhelos, y fuerzas similares.
Nos han enseñado a tener miedo a la libertad; miedo a tomar decisiones,
miedo a la soledad. El miedo a la soledad es un gran impedimento en la
construcción de la autonomía. Marcela Lagarde
La tristeza y la melancolía son dos sentimientos presentes en algún
momento de la vida de todas las personas, al igual que la alegría y el
placer. Los dos primeros no son en sí patológicos, pero en algunas
ocasiones pueden llegar a serlo para ciertas personas. Cuando el estado
de ánimo de un individuo en un determinado momento de su vida sufre
sentimientos severos y prolongados de tristeza o síntomas relacionados
que afectan a su capacidad para relacionarse con otros, trabajar o
afrontar el día, la tristeza se convierte en una enfermedad, que se
conoce como depresión.
Causas
Las causas de la depresión son variadas, pero la bioquímica puede
ayudar a explicar algunos casos. Las personas deprimidas muestran
niveles muy altos de cortisol (una hormona) y de varios agentes
químicos que actúan en el cerebro, como los neurotransmisores
serotonina, dopamina y noradrenalina. Estos niveles pueden estar
elevados por motivos hereditarios. Explicaciones dadas al origen
familiar de la depresión son que los niños reciban una visión triste
del mundo por el comportamiento de sus padres, o crecer en un ambiente
que no es totalmente enriquecedor.
Respecto a la depresión
que no está causada por motivos familiares, las pérdidas emocionales
muy profundas pueden causar cambios bioquímicos que impulsen la
depresión. Estos cambios pueden provocar la enfermedad no de una forma
inmediata, sino más adelante. Otros factores pueden ser la pérdida de
un trabajo, o la falta de capacidad de adaptación a determinados
cambios. A pesar de que no se sabe exactamente qué provoca la depresión
existen diversos factores identificados como los desequilibrios de los
neurotransmisores del cerebro. Los fármacos antidepresivos pueden
ayudar a solucionar este problema.
Síntomas de Depresión
Estado de ánimo depresivo la mayor parte del día según lo indica el
propio sujeto o la observación realizada por otros. En los niños y
adolescentes el estado de ánimo puede ser irritable.
Disminución acusada del interés o de la capacidad para el placer en todas o casi todas las actividades.
Pérdida importante de peso sin hacer régimen o aumento de peso.
Insomnio o hipersomnia.
Agitación o enlentecimiento psicomotores.
Fatiga o pérdida de energía casi cada día.
Sentimientos de inutilidad o de culpa excesivos o inapropiados.
Disminución de la capacidad para pensar o concentrarse, o indecisión.
Pensamientos recurrentes de muerte, ideación suicida recurrente sin
un plan específico o una tentativa de suicidio o un plan específico para
suicidarse.
Prevención
Aparte del tratamiento farmacológico o psicoterapéutico es
importante -una vez que haya hecho efecto y que el paciente sienta que
ha mejorado su condición, es importante que se sigan ciertos consejos o
modos de vida.
Tener pensamientos positivos
Cuidar la salud física
Mantener un calendario diario uniforme.
Reanudar las responsabilidades forma lenta y gradual.
Aceptarse a uno mismo. No compararse con otras personas que considera favorecidas.
Expresar las emociones
Seguir en todo momento y hasta el final el tratamiento impuesto
Reunirse periódicamente con el terapeuta
Comer una dieta equilibrada
Hacer ejercicio físico
Tipos de Depresión
La depresión mayor se manifiesta por una combinación de síntomas que
interfieren en la capacidad de las personas para trabajar, estudiar,
dormir, comer y disfrutar de actividades que, en circunstancias
normales, deberían resultar placenteras. La depresión suele ocurrir una
vez, pero es una enfermedad que suele provocar recaídas a lo largo de la
vida.
La distimia es un tipo de depresión menos grave. Los síntomas se
mantienen a largo plazo, pero no evitan la actividad de las personas.
También puede ser recurrente, es decir aparecer más de una vez en la
vida.
El desorden bipolar es el tercer tipo. También se denomina enfermedad
maniaco-depresiva. La prevalencia de esta patología no es tan alta como
las dos anteriores. Se caracteriza por cambios de humor. Estados de
ánimo muy altos se ven sucedidos por otros muy bajos. Estos cambios son
bruscos a veces, pero lo más frecuente es que sean graduales. En el
ciclo de depresión, las personas tienen alguno o todos los síntomas de
un problema depresivo.
En el ciclo maniaco, pueden sentirse
hiperactivos, excesivamente locuaz y con demasiada energía. A veces la
manía afecta al pensamiento, el juicio y el comportamiento social del
individuo. Si la manía se deja sin tratar puede llevar a un estado
psicótico. Si la manía no se trata puede empeorar y provocar un estado
psicótico Depresion Post-parto Alrededor del 10 o 15 por ciento de las
nuevas madres lloran constantemente, se sienten terriblemente ansiosas,
no pueden dormir e, incluso no son capaces de tomar decisiones
sencillas.
Otros síntomas son la tristeza profunda, el insomnio, el letargo y la
irritabilidad. Es lo que se conoce como depresión post-parto. La
depresión post-parto es una deformación severa del baby blues, un
problema que sufren las dos terceras partes de las madres que se
manifiesta con un poco de tristeza y ansiedad. Algunas madres sufren una
ruptura total, denominada psicosis post-parto. Las razones por las que
se produce no están muy claras. Puede ser el stress, el desajuste
hormonal producido durante el embarazo y el posterior parto (las
hormonas femeninas circulan abundantemente durante el embarazo y caen
bruscamente después). Además, durante el embarazo suben los niveles de
endorfinas, una molécula humana que hace que el cuerpo se sienta bien.
Esta molécula también decae tras dar a luz.
Por último, haber padecido una depresión aumenta el riesgo también.
Existen diversos tratamientos. Uno de los más utilizados es la terapia
grupal, aunque en ocasiones también es necesario tomar antidepresivos.
Respecto a estos fármacos, existe cierto medio de que se puedan
transmitir al niño a través de a leche. En general, el único fármaco que
da problemas es el litio, que sí se introducen en la leche, por lo que
es necesario dejar de amamantar.
Diagnósticos
La indagación en la historia del paciente es un arma fundamental para
que el profesional pueda diagnosticar un caso de depresión. Se debe
incluir una historia médica completa, donde se vea cuándo empezaron los
síntomas, su duración y también hay que hacer preguntas sobre el uso de
drogas, alcohol o si el paciente ha pensado en el suicidio o la muerte.
Una evaluación diagnóstica debe incluir un examen del estado mental
para determinar si los patrones de habla, pensamiento o memoria se han
afectado. Para diagnosticar un trastorno depresivo, se deben de dar en
el periodo de dos semanas alguno de los síntomas antes tratados. Uno de
ellos debe ser el cambio en el estado de ánimo, pérdida de interés o de
la capacidad para el placer.
Tratamientos
El ambiente que rodea a una persona que sufre depresión es
fundamental para lograr su rehabilitación. La comprensión y el cariño
de los familiares y allegados es importante, como lo es la paciencia,
puesto que la falta de ganas y motivación de los enfermos puede
provocar la desesperación. Sugerir y no ordenar actividades, proponer y
no imponer conversaciones son apoyos básicos a la terapia impuesta por
los profesionales. Uno de los problemas más importantes que presenta
este grupo es el abandono de las terapias, por lo que es fundamental
inducirle a seguir el tratamiento hasta el final.
El
tratamiento contra la depresión es de dos tipos: farmacológico y
psicoterapia. Dependiendo del problema puede ser necesario uno u otro,
o una combinación de los dos. Cuando los casos son graves existe otro
tipo: la terapiaelectroconvulsiva o electroshock. En general, el
tratamiento farmacológico es necesario. En una primera fase se medica
de forma intensa al enfermo para conseguir que los síntomas
desaparezcan y se pueda iniciar la recuperación del enfermo. En una
segunda fase se suministran fármacos para impedir la manifestación de
la enfermedad.
- Tratamiento farmacológico con antidepresivos:
Los antidepresivos se utilizan para corregir desequilibrios en los
niveles de las sustancias químicas del cerebro, especialmente la
serotonina, un químico cerebral que transmite mensajes en el área del
cerebro que controla las emociones, la temperatura corporal, el apetito,
los niveles hormonales el sueño y la presión sanguínea. Los
antidepresivos actúan incrementando los niveles de serotonina en las
células del cerebro. Cada clase de antidepresivos lo hace de una forma
distinta. No suelen provocar dependencia. Normalmente tienen efecto
entre tres y seis semanas después de iniciar el tratamiento. Si no se
han producido avances en este tiempo, el médico suele optar por cambiar
el tratamiento, añadiendo más dosis u optando por otro antidepresivo.
Entre sus efectos secundarios más comunes se encuentran el insomnio,
nerviosismo, disfunción sexual, nauseas, mareos o aumento de peso.
- Psicoterapia:
Su fin es ayudar al paciente a conocerse mejor y cambiar sus malas formas de pensar, sentir y actuar.
- Terapia electrocompulsiva:
Se utiliza cuando el paciente no puede tomar medicación o no mejora con
ella; cuando el riesgo de cometer el suicidio es alto o si existe
debilitamiento por otra enfermedad física.
Otros datos
Familiares de enfermos deprimidos: Bien por causas genéticas,
bien por su relación continua con los pacientes, los familiares de
enfermos deprimidos tienen el doble de posibilidades de sufrir la
patología
Mujeres: Las mujeres han de enfrentarse a los
efectos hormonales del ciclo menstrual, del embarazo, del parto, la
menopausia o los contraceptivos. Por otra parte, las mujeres que han
tenido hijos tienen menos probabilidades de sufrir depresión que las que
no, probablemente debido a la intensidad de los lazos con sus vástagos,
que las hace más fuertes frente a otros daños emocionales causados por
determinadas pérdidas.
Hombres: Los hombres muestran menos claramente los
síntomas de la depresión, pero esto no quiere decir que no la sufran.
Los expertos consideran que la esconden, quizás debido al hábito
cultural que hace que los hombres muestren menos abiertamente sus
emociones. Por eso, en lugar de los síntomas clásicos es frecuente que
la revelen mediante el alcoholismo u otros abusos en ciertas sustancias,
y mediante comportamiento antisocial.
La generación del baby-boom: Los nacidos después de
la Segunda Guerra Mundial tienen más riesgos de sufrir una depresión
que los más ancianos. Muchos de ellos muestran los problemas de
desarraigo producidos por las rupturas en la familia clásica que se
produjeron durante los años 50 y 60, cuando aumentó la tasa de
divorcios, emigraciones, etc., que conllevó la pérdida de relaciones
familiares y de amigos. Además, la gran cantidad de personas que nació
en esa época aumentó el sentimiento de competencia en los colegios, los
trabajos etc.
Ancianos: A veces se produce la depresión como una
reacción al deterioro físico o la pérdida de amigos, familiares o de
actividades que anteriormente producían placer y que hay que abandonar a
ciertas edades. El problema de esta edad es que se tiende a considerar
que los ancianos pierden parte de su vitalidad y están tristes "por la
edad", lo que provoca que muchos casos no se diagnostiquen.
Niños: La depresión no es común en los niños,
aunque los abusos, pérdidas de seres queridos o que uno de los padres
padezca una depresión severa, puede aumentar el riesgo. Normalmente, no
muestran los signos típicos, sino que lo manifiestan en problemas en el
comportamiento. Normalmente, irritabilidad, agresividad y problemas
escolares.
Adolescentes: El suicidio de los adolescentes se
está convirtiendo en una de las principales causas de muerte. Los
adolescentes experimentan cambios hormonales importantes, y es una época
en la que se debilitan los lazos familiares cuando aún no se han
formado como individuos. La depresión en los adolescentes, al igual que
en los niños, se suele manifestar con problemas en el colegio, cambios
repentinos en el humor o en el comportamiento sin sentido, incapacidad
de recuperarse tras una decepción, etc.
Residentes en ciudades: No se sabe por qué, pero
los habitantes en ciudades se deprimen más que las personas que viven en
áreas rurales. Esto sucede en la depresión severa, no en otras formas
de depresión.
Enfermos crónicos: Es normal sentirse triste cuando
se está enfermo o se ha diagnosticado a alguien con una enfermedad
crónica o grave. Sin embargo, no es normal estar deprimido.
Drogas y alcoholismo: Un alto porcentaje de las
depresiones -especialmente en los hombres- está causado por el uso de
drogas depresivas, entre las que se encuentra el alcohol, los
narcóticos, los sedantes y los tranquilizantes.
Es conocido por sus libros El mito de la enfermedad mental y La fabricación de la locura: un estudio comparativo de la inquisición con el movimiento de salud mental, en los que planteó sus principales argumentos con los que se le asocia.
Su postura sobre el tratamiento involuntario es consecuencia de sus raíces conceptuales en el liberalismo clásico y el principio de que cada persona tiene jurisdicción sobre su propio cuerpo y su mente. Szasz considera que la práctica de la medicina
y el uso de medicamentos debe ser privado y con consentimiento propio,
fuera de la jurisdicción del Estado, a su vez cuestiona los regímenes
autoritarios y los Estados policiales.
Afamado psiquiatra ataca a Psiquiatras y a la Psiquiatria
http://www.youtube.com/watch?v=_YNovSjMz5A
Los argumentos de Szasz pueden resumirse como sigue:
El mito de la enfermedad mental: Es una metáfora médica para describir una conducta perturbadora, tal como la esquizofrenia,
como si fuera una "enfermedad". Aunque la gente se comporte de manera
perturbadora, no significa que tengan una enfermedad. Para que exista
una verdadera enfermedad, la entidad debe ser capaz de medirse o probada
de manera científica. Según Szasz, una enfermedad debe detectarse en
una autopsia y cumplir con las definiciones de patología
en lugar de ser decretada por votos por los miembros de la Asociación
Psiquiátrica Americana. Las enfermedades mentales no son enfermedades
reales, arguye Szasz, quien las coloca en la categoría de lenguaje
metafórico. La psiquiatría, afirma Szasz, es una pseudociencia
que parodia la medicina al usar terminología que suena a medicina:
terminología que ha sido inventada los últimos cien años. Además de
seudociencia, la psiquiatría es un sistema de control social, no una
rama de la medicina de acuerdo a Szasz. La noción que la psiquiatría
biológica es una verdadera ciencia ha sido cuestionada también por otros críticos.
Separación de la psiquiatría del Estado: El Estado no tiene derecho a forzar ‘tratamientos’,solamente el consentimiento del paciente legitima un tratamiento.
Derecho a morir: En una analogía del derecho a la vida, Szasz
arguye que el individuo debe ser libre de escoger cuándo morir sin
interferencia de la institución médica o el Estado. Szasz cree que el suicidio es uno de los derechos más fundamentales.
Abolición de la hospitalización involuntaria: Nadie debe ser
privado de su libertad a menos que haya sido encontrado culpable de una
ofensa criminal. Según Szasz, privar a una persona de su libertad ‘por
su propio bien’ es inmoral.
Szasz es a veces identificado con el movimiento antipsiquiátrico. Para Szasz la hospitalización involuntaria es inmoral, si continúa indisputada, crecerá hasta convertirse en una distopía orwelliana.
¡CUIDADO CON LOS DIAGNÓTICOS DE TDAH HECHOS A LA LIGERA!
Gracias a Virginia Rodrigo del Solar
Desde nuestro centro, somos testigos de cómo se están
haciendo diagnósticos de TDAH en los niños de manera completamente
desmesurada y con muy poco o ningún rigor diagnóstico.
Nos preguntábamos cómo era posible que en una clase de 22 a 25 niños
de ocho- nueve años pudiera haber 6-7 niños (a veces hasta más de un
30%) diagnosticados de TDAH y MEDICADOS con Concerta; y poco a poco
hemos ido encontrando la respuesta: PORQUE ESTÁN MAL DIAGNOSTICADOS
El proceso que se sigue en estos casos, es el siguiente:
- Profesores o padres preocupados porque el niño es inquieto y sus aprendizajes a veces no adecuados.
- Los padres agobiados van con el niño al profesional (a veces hasta con prestigio).
- Este les pasa un cuestionario a los padres y le hace al niño una cuantas preguntas (aproximadamente media hora de consulta).
- Los padres se van con la receta del Concerta mucho más tranquilos
porque además, el profesional les ha dicho que si no medican a su hijo,
podrá ser en el futuro un delincuente.
- Al principio el niño suele estar más tranquilo, pero con el tiempo sigue igual, aunque con cara de dormido o poco espabilado.
- Los aprendizajes siguen igual, no hay avances.
Partamos de la siguiente premisa: el TDAH existe y hay niños a los
que les conviene estar medicados para poder mejorar, adquirir mejor los
aprendizajes adecuados a su edad y vivir más tranquilos ellos y quienes
les rodean. Pero precisamente porque existe, hay que hacer buenos
diagnósticos, evaluar a fondo, descartar otro tipo de problemas que
pueden ser el motivo real de esa desatención o actividad excesiva, y
estar muy seguro de cuál es el problema real. Si no se hace un buen
diagnóstico, NUNCA se va a poder ayudar bien ni al niño, ni a sus
padres, ni a sus profesores. La medicación no sólo no ayuda cuando se
administra sin necesidad, sino que además, es peligrosa. ¿Quién de
nosotros tomaría antipsicóticos sin padecer de esquizofrenia,
antidepresivos sin tener depresión, o litio sin estar bien diagnosticado
de bipolaridad? Esto se entiende perfectamente, ¿qué pasa entonces con
todos estos niños que están siendo medicados con Concerta sin estar bien
diagnosticados? Esto es muy grave y tiene repercusiones enormes; se
trata de niños que empiezan a ser medicados con cinco años sin
necesidad, para finalmente no encontrar solución a su problema.
Hay niños que tienes dificultades porque tienen ciertos problemas de
atención o porque son más movidos, o por otros problemas que conviene
conocer y tratar, y muy lejos de ser niños con TDAH y tener necesidad de
ser medicados, son niños que haciendo una buena evaluación consiguen
los resultados deseados mejorando en lo que necesitan exactamente.
El diagnóstico tal y como se está haciendo hoy en día en ciertos
sitios, es una atrocidad, un gran handicap social que está generando
enfermedad y problemas cada vez más importantes en los niños y familias.
El futuro de estos niños está en juego y hay que tratar de ayudarles y
dar soluciones de forma adecuada y no medicando indiscriminadamente.
Entendemos el “alivio” que experimentan los padres cuando los
profesionales ponen un nombre al comportamiento de su hijo, cuando por
fin alguien les da una explicación para “eso” que ellos observaban o
para “aquello” de lo que se quejaban los profesores; pero desde el buen
hacer profesional queremos pedir a los padres, que sean exigentes con el
diagnóstico de su hijo, que estén seguros de que al niño se le hace un
buen estudio que incluya:
- Entrevista con los padres
- Cuestionarios a padres (opcional a profesores)
- Pruebas objetivas al niño y baremadas en: capacidad intelectual, distintas áreas atencionales y ansiedad.
- En función del motivo de consulta, administrar más pruebas que
puedan detectar dificultades relacionadas: escalas de comportamiento,
estilos educativos de los padres, pruebas de detección de la dislexia,
etc.
- Finalmente una buena devolución en la que se informe correctamente a
los padres de los posibles tratamientos, de soluciones para el problema
que presenta su hijo y de las diferentes opciones existentes. No sólo
de tratamiento farmacológico, sino de un tratamiento completo combinado
que abarque espectro educativo y comportamental.
Para padecer TDAH hace falta algo más que ir mal en los estudios o ser un niño inquieto o con falta de atención.